
Hace unos días tuvimos una salida familiar con hijos, sobrinos y nietos, nos estábamos divirtiendo mucho hasta que una patada voladora impacto en la boca de mi hermana y un diente salió despedido por el aire.
Esta experiencia fue inspiradora para escribir este artículo.
Mi odontóloga, la Dra Karina Capria a la que le doy muchísimas gracias por la colaboración me dio un valioso aporte.
Para ir entrando en tema…
Es importante destacar que hay dos tipos de dientes: los temporarios o de leche, y los permanentes o de adultos.
La pérdida de un diente permanente ocasionada por un golpe debe considerarse
una emergencia odontológica que requiere primeros auxilios en forma inmediata ya que
el diente debe ser reimplantado lo antes posible.
En cambio la pérdida de un diente temporario o de leche sólo debe recibir primeros auxilios si hay una lesión en la encía.
No requiere una reimplantación como en el caso de los dientes permanentes, aunque es aconsejable una valoración por un odontólogo, para poder generar los medios para conservar el espacio y así poder asegurarnos la erupción del diente definitivo en una posición adecuada.
¿QUÉ PODEMOS HACER ANTE LA PÉRDIDA DE UN DIENTE PERMANENTE?
Lo primero es colocar al niño con la cabeza ligeramente hacia adelante, de manera que no aspire sangre.
Si hay hemorragia, debes realizar una leve presión sobre la encía.
Trata de encontrar el diente. Si lo encontrás , no lo tomes por la raíz.
Se debe actuar con tranquilidad y rapidez, de esto depende el éxito del tratamiento ya que un diente reubicado en un espacio de tiempo corto, de 30 a 120 minutos, tiene mayores posibilidades de reinsertarse con éxito.
En el caso de no encontrar el diente permanente , es muy importante que el niño sea examinado por un odontólogo lo antes posible.
En caso de que encuentres el diente y esté sucio, enjuágalo con agua con cuidado de no tocar la raíz del diente. NO lo frotes ni lo limpies con antisépticos, ni con jabones. Límpialo solo con agua.
Trata de colocar con suavidad el diente en el hueco de la encía donde estaba implantado.
Trata de mantener al niño tranquilo, intenta que colabore manteniendo el diente en este sitio sostendiéndolo con un dedo. En caso de no ser esto posible, por falta de colaboración,debemos transportar la pieza dental al odontólogo en algunos de estos medios:
Saliva (dentro de la boca) de la persona acompañante, entre la parte interna de los labios y la cara de los dientes.
En un vaso con leche.
Suero fisiológico.
Es de suma importancia que la raíz del diente permanezca humedecida.
“IMPORTANTE:
El niño debe ser examinado por un odontólogo dentro de la hora posterior a la pérdida del diente.
En el caso de que no encuentres el diente permanente, es muy importante que el niño sea examinado por un odontólogo lo antes posible, puede que el diente esté incrustado en la encía.